Cuéntanos una lección que te gustaría haber aprendido antes.

Como para colgarse?

Bitácora. Tengo hambre. Me está apeteciendo unos huevos fritos, sobre unas lonchas crujientes de panceta salada y caramelizada con salsa de mostaza.
Mierda. Me olvidé de poner a fermentar la bestia. Nunca se puede amasar de forma helicoidal, y a la vez estirarlo en arco converso, sin cortarlo al compactarlo. Y escacharlo. Y en medio de un salto mortal en el trapecio. Sería un delito freírla en obleas concéntricas?
La teoría del caos divergente es demasiado obvia. Determinista. No apetecible.
Me encontré, haciendo un equilibrio impermeable e impertinente impertérrito, con dos cabezas pensantes nacidas del mismo año. Tras hablar de una bebida de ingesta mañanera, no hubo manera de llegar a un acuerdo. Me he ido a hacer la mía. Llámame egoísta. Pero recordé, que otra vez que nos encontramos, una saltaba de cabeza, mientras la otra se aferraba a las suspicacias. La divergencia no es harmónica. Suena a bongó desatado.

Me gusta
Feliz día y abrazote.


Commentaires

Ongi Etorri

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *