Njour. Egun on.
Estamos siguiendo la pista de los pilotes, o de los hitos fronterizos. También los llaman mojones, pero hoy me parece demasiado escatológico.
Una de esas curiosidades, es la de intentar separarnos. No mezclar las churras con las merinas.
Venimos de a mano derecha, Pekozeta. Suena a Peta Zeta. Hay que ser viejo, como los sugus, o el chupachups para entender la chanza. Es Luzaide. Se sabe porque a un metro, hay un cartel que indica que si quieres setas, pases por la alcaldía a pedir la licencia de recogida.

Sopa de clementinas.

Nos hemos parado en la 195. Eso ya lo ves. Pero sé que hay una ruta que sube hasta Roncesvalles, que hace el recorrido de los hitos. Será la muga? Hmmmm
Cosas que pensar. En cuanto la ubique, la ruta, me lanzaré a por ella. Mientras, me dejaré llevar por las nostalgias, los pasos circulares, las ganas de círculos concéntricos en la estela gravitacional del agar-agar en suspensión mitológica.
Cuando llegue, me haré un café con cacao y azúcar. Sin leche, que me engorda. Y una…
Feliz día y abrazote.