Njour. Egun on.
En las canteras de pizarra del Pirineo, los colores suelen sacarse en lascas de cobaltos maniatados maniáticos. Al revés queda mejor.
Si.
Hay una poesía cuasi barroca en estos cielos cuajados de grises y negros, tan alejados de las batallas navales de uno de los mejores acuarelistas británicos. Al revés se ve confuso.
Si.
Hay hileras de cañamón perdidas por los cerros. Y cerrando muy fuerte los oídos, casi oyes clamar en cien cánones, a un oso bardo y pardo, con problemas de molares.
Bueno.

Oír, escuchar, dar silencios. Regalar sonrisas. Eso sí son tradiciones. Y no traiciones.
Feliz día y abrazote.